A continuación
hacemos referencia a lo que se puede hacer para conseguir una buena práctica en
cuanto a los derechos humanos y que es lo que está en nuestras manos para
conseguir que estos no se vulneren. Podemos comenzar haciendo referencia a la
necesidad de reconocer la importancia y la necesidad de educar en derechos
humanos, así como fortalecer el respeto de los derechos humanos y las libertes
fundamentales, desarrollar actitudes positivas en los educadores hacia la
humanización de las nuevas generaciones, diferenciar las distintas etapas de la
educación el derechos humanos, reflexionar sobre los distintos problemas que
supone la educación en derechos humanos, diseñar distintas actividades para
educar en cada una de las distintas generaciones de derechos humanos,
contrastar las recomendaciones de la distintos organismos internacionales en la
educación de los derechos humanos, gestionar la educación de los derechos
humanos e identificar los objetivos y contenidos básicos para una educación en
y para derechos humanos.
Para que lo
derechos humanos se cumplan las personas debemos de saber cuáles son y el por
qué de ellos. La educación construye una base y una condición necesaria, aunque
nos suficiente, para que haya una cultura en derechos humanos. Esto no
significa solamente enseñar los derechos humanos sino educar en y desde ellos.
En esta misma línea debemos saber que no basta con adquirir una serie de
conocimientos sino desarrollar unas actitudes y destrezas que permitan por un
lado consolidar la identidad personal y por otro una convivencia basada en la
aceptación y respeto a los demás.
Del mismo modo
hay que tener en cuenta que la educación es el derecho humano encargado de
enseñar el resto de los derechos y extender su conocimiento. Cabe mencionar que
los derechos humanos ayudan a desarrollar un pensamiento y una práctica
educativa que tenga como meta alcanzar una educación humanizadora. Además a
través de la educación en derechos
humanos se recogen los valores básicos que facilitan la convivencia y
ayudan a crear una sociedad pluralista y demócrata.
Para conseguir
lo que venimos mencionando es muy importante que el alumno entienda el por qué
de la importancia de los derechos humanos. Cada vez es más generalizada la
opinión de que la educación en derechos humanos es fundamental y puede
contribuir a la disminución de las vulneraciones de los mismos y a la creación
de sociedades libres, justas y pacificas.
Continuando con
lo anteriormente mencionando educar en derechos humanos supone educar desde y
para unos determinados valores, tales como la justicia, la cooperación, la
solidaridad, el compromiso, la autonomía personal y colectiva, el respeto, etc.
Al mismo tiempo que se cuestionan aquellos que no son favorecedores para las
personas, como la discriminación, la intolerancia, el etnocentrismos, la
violencia, la indiferencia o la insolidaridad.
Bokelman nos
habla de que gracias a la educación logramos el desarrollo pleno de las
capacidades de hombre, que de otra forma no sería fácil alcanzar ya que aporta
a cada hombre y a cada mujer, independientemente de su cultura, la posibilidad
de aprender a ser, a convivir, a hacer y conocer, a la vez que se pretende la
integración de ese individuo en la sociedad en la que vive, como miembro activo
y responsable que es de la misma. La educación presta el mejor servicio al
hombre; ayudándole a madurar, haciéndole consciente de sí mismo y ser capaz de
autodeterminar su propio proyecto de vida en acciones libres y responsables.
Haciendo
referencia de nuevo a la educación en derechos humanos podemos decir que ésta
exige a la escuela y a todas las instituciones una responsabilidad social
corporativa para afrontar los retos que se le presentan, la educación es un
medio para llegar a estos retos de manera compartida y global. Además la
educación en derechos humanos es algo que debe abarcar toda la vida del hombre.
Y debe hacerse desde los distintos ámbitos de la educación ya sea formal, no
formal o informal, dependiendo del ámbito tendrá diferentes momentos donde
poder asegurar la consecución de sus objetos, así desde la educación en
derechos humanos puede organizarse como un proyecto educativo del centro
escolar, como una asignatura más como una materia transversal etc. Las prácticas
educativas sobre derechos humanos, independientemente del ámbito en el que se
den, debe potenciar entre los alumnos el uso del pensamiento crítico, la toma
de decisiones, la discusión y la resolución de problemas.
Por último
debemos decir que para conseguir la educación en derechos humanos ha de hacerse
de modo cooperativo fomentando en el grupo la capacidad de diálogo, de escuchar
y de colaborar.
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